La naturalidad y la ausencia de pesticidas tóxicos hace que elegir alimentos ecológicos se traduzca en beneficios importantes para la salud.
- REDUCEN EL RIESGO DE ALERGIAS: Pesticidas y antibióticos interfieren con el desarrollo del sistema inmunitario. El estudio Parsifal, realizado en 2006, probó que las familias que viven en granjas ecológicas y las personas que consumen alimentos ecológicos tienen una incidencia de alergias por debajo de la media.
- PREVIENEN LA OBESIDAD: Los pesticidas alteran el funcionamiento metabólico y endocrino. Algunos son obesógenos que aumentan el apetito y favorecen la generación de tejido graso. Para este efecto, y para todos los que tienen que ver con el efecto hormonal, son suficientes dosis muy pequeñas que se encuentran dentro de los límites permitidos en los alimentos. Los ecológicos carecen de estos residuos.
- DISMINUYEN EL RIESGO DE TRASTORNOS NEUROLÓGICO: Muchos pesticidas son tóxicos para las neuronas y aumentan el riesgo de desarrollar alteraciones neurológicas y deficiencias intelectuales. La exposición a pesticidas es un factor de riesgo reconocido para el Parkinson.
- MENOS ALTERACIONES REPRODUCTIVAS: Buena parte de los pesticidas se comportan como disruptores endocrinos en el cuerpo que imitan los estrógenos femeninos. Se asocia la exposición a pesticidas en los alimentos con un aumento del riesgo de sufrir alteraciones en el desarrollo del sistema reproductor de los niños, infertilidad y cánceres hormonodependientes.
- PREVIENEN EL CÁNCER: El consumo de alimentos ecológicos a un menor riesgo de cáncer, asegura que los investigadores no esperaban encontrar un efecto positivo tan importante. Si los resultados se confirman, «promover el consumo de alimentos orgánicos en la población general puede ser una prometedora estrategia preventiva contra el cáncer».
- EVITAN LAS INFECCIONES RESISTENTES: El uso excesivo de antibióticos en las granjas con animales favorece la aparición de bacterias que pueden resistir la acción de los medicamentos. En la producción ecológica solo se utilizan antibióticos cuando es imprescindible. Si se consumen solo alimentos vegetales se ayuda a que el riesgo sea todavía menor.